La artrosis es una patología común que puede causar dolores y pérdida de movilidad. Este fenómeno resulta del desgaste progresivo del cartílago, el tejido esencial para la flexibilidad y amortiguación de las articulaciones. Descubre en este artículo cómo la micronutrición puede contribuir a ralentizar la degradación del cartílago y aliviar los síntomas de la artrosis.
Una articulación es una estructura anatómica donde dos huesos se encuentran, permitiendo el movimiento o la estabilidad. La articulación está compuesta por diversas estructuras, entre ellas el cartílago articular, la cápsula articular, los ligamentos y los tendones.
El cartílago, tejido esencial de la articulación, juega un papel clave en la protección de las articulaciones al actuar como un amortiguador. Permite absorber los impactos, reduciendo así el impacto sobre los huesos durante los movimientos o aterrizajes.
¿De qué está compuesto el cartílago?
El cartílago está compuesto en su mayoría 2/3 de fibras de colágeno, que forman una red fibrosa que proporciona tanto elasticidad como resistencia a la articulación.
También está compuesto por un 1/3 de proteoglicanos, proteínas sulfurosas (como el sulfato de glucosamina, el sulfato de condroitina, el sulfato de queratán y el ácido hialurónico), que aportan hidratación y elasticidad a la articulación.
El colágeno es una proteína estructural clave en el cuerpo humano, formada por cadenas de 3 aminoácidos organizados en hélice. Estas cadenas siempre incluyen glicina y prolina, además de un tercer aminoácido variable.
La síntesis del colágeno en el cuerpo comienza con la descomposición de las proteínas alimentarias en aminoácidos, como la prolina, glicina y, por ejemplo, lisina, que luego se utilizan para formar cadenas peptídicas de colágeno. Esta formación requiere la presencia de 2 cofactores enzimáticos esenciales: la vitamina C, que facilita la integración del tercer aminoácido en la cadena peptídica, y el magnesio, esencial para la síntesis peptídica. Finalmente, las cadenas de colágeno se ensamblan en estructuras helicoidales, formando el colágeno funcional.
El colágeno cumple cuatro funciones importantes en el cuerpo:
Existen más de 10 tipos diferentes de colágeno en el cuerpo, que se distinguen según su densidad y contenido en aminoácidos. Sin embargo, los colágenos tipo 1, 2, 3 y 4 son los más estudiados:
Uno de los principales factores responsables de la pérdida de colágeno en el cuerpo es el envejecimiento. A partir de los 40 años, la síntesis de colágeno disminuye alrededor del 1% por año. Así, a los 40 años, el nivel de colágeno en el cuerpo puede reducirse en un 30%, a los 50 años en un 45%, y a los 60 años en un 60%.
Esta pérdida de colágeno afecta principalmente a los cartílagos, los huesos, las articulaciones y la piel. Sin embargo, la velocidad y extensión de esta degradación varían de una persona a otra, dependiendo de varios factores, como las carencias nutricionales (especialmente en proteínas y colágeno de origen animal), dietas especiales, traumatismos óseos repetidos, sobrepeso e inflamaciones crónicas.
La disminución de colágeno conlleva diversos problemas, incluyendo una pérdida de movilidad articular, una disminución de la firmeza o tensión de la piel (con la aparición de arrugas y líneas finas) y una cicatrización más lenta.
La suplementación con colágeno a través de la micronutrición presenta numerosos beneficios.
En primer lugar, tiene ventajas para la piel, contribuyendo a la prevención del envejecimiento cutáneo, mejorando la flexibilidad, elasticidad y belleza de la piel, y reduciendo la aparición de arrugas.
La suplementación con colágeno también es beneficiosa para las articulaciones, ya que ayuda a aliviar el dolor, la rigidez y la inflamación asociada con la artrosis, a la vez que contribuye a prevenir la osteoporosis y a reparar tendones y ligamentos.
Para los deportistas, tomar suplementos de colágeno puede ser beneficioso para favorecer la recuperación después de lesiones y limitar la pérdida de fuerza muscular tras esfuerzos intensos.
Por último, en el contexto del envejecimiento, el aporte de colágeno a través de la micronutrición puede estimular la producción natural de colágeno en el cuerpo, ayudando así a prevenir los signos del envejecimiento prematuro, especialmente en la piel y las articulaciones.
La artrosis es una afección degenerativa e inflamatoria que resulta de la disminución del cartílago, lo que provoca una pérdida de la zona de protección de la articulación. Esta degradación del cartílago causa dolores mecánicos e inflamatorios, que suelen ser más intensos por la noche, ya que la articulación se inflama de manera constante. Con el tiempo, esta inflamación crónica puede llevar a la destrucción progresiva de la articulación.
Existen dos estadios de artrosis.
El primer estadio de la artrosis, denominado "mecánico", está relacionado generalmente con el envejecimiento y con desequilibrios funcionales derivados de factores como secuelas de traumatismos previos, exigencias físicas de las articulaciones en el trabajo o la práctica de actividades deportivas.
En esta fase, los síntomas incluyen dolor articular, disminución de la movilidad, rigidez y molestias funcionales, como cojera. Esta fase se caracteriza por una pérdida progresiva de colágeno en los tejidos articulares, lo que provoca una reducción de la movilidad articular y disminuye la elasticidad y capacidad de amortiguación del cartílago. Estas alteraciones mecánicas contribuyen a la aparición de dolores, ya que la articulación pierde su protección y se vuelve menos eficaz para gestionar las cargas físicas.
El segundo estadio de la artrosis, denominado "inflamatorio", marca una aceleración de la degradación articular y puede ocurrir sin pasar por la fase mecánica.
En este estadio, la inflamación articular se vuelve crónica y daña los condrocitos, reduciendo así la síntesis de colágeno y acelerando la pérdida de cartílago. Esta alteración favorece la activación de los osteoclastos, responsables de la remodelación ósea, lo que agrava las lesiones articulares.
Entre los síntomas característicos de esta fase se encuentran la presencia de edema, derrames articulares y dolor inflamatorio persistente, incluso en reposo, acompañado de rigidez matutina. Con el tiempo, puede haber deformación de las articulaciones, lo que compromete su funcionamiento normal y aumenta el dolor y la pérdida de movilidad.
Para aliviar la artrosis de estadio 1, la micronutrición puede ser útil. Se recomienda aportar péptidos de colágeno, acompañados o no de antiinflamatorios para limitar la inflamación. Los péptidos de colágeno utilizados en suplementación pueden ser de cerdo, vaca o pescado.
Una marca destacada es Peptan®. El colágeno Peptan® es un colágeno marino ofrecido en forma de péptidos de colágeno que, según estudios científicos, aporta múltiples beneficios para el apoyo del cartílago.
En Ysonut hemos desarrollado un complemento alimenticio para aliviar la artrosis de estadio 1 utilizando el colágeno Peptan®:
Este suplemento es perfectamente absorbido por el cuerpo y es ideal para aliviar las artrosis que aún no están muy avanzadas, sin derrames ni deformaciones.
Para aliviar la artrosis de estadio 2, que es más avanzada con derrames y deformaciones, generalmente en personas mayores, la micronutrición puede ser útil.
Hemos desarrollado el suplemento ARTICULATIONS:
Encuentra todos nuestros suplementos alimenticios para aliviar las articulaciones directamente con tu profesional de salud, en tu farmacia más cercana o en nuestra tienda en línea Ysonut.
Dar Q.A. et al., 2016, Oral hydrolyzed type 1 collagen induces chondroregeneration and inhibits synovial inflammation in murine posttraumatic osteoarthritis, Osteoarthritis and Cartilage, 24:S532–S533, disponible sur : https://www.oarsijournal.com/article/S1063-4584(16)00995-X/fulltext
Malfait, A. M., & Clark, J. D. (2014). "The role of cartilage and collagen in joint health." Nature Reviews Rheumatology, 10(8), 457-463.
Zhao, R., Zhang, S., Li, S., & Zhao, X. (2016). "Efficacy of oral collagen peptide supplementation on knee osteoarthritis: A randomized clinical trial." Journal of Clinical Orthopaedics and Trauma, 7(3), 244-250.
Bello, A. E., & Oesser, S. (2006). "Collagen hydrolysate for the treatment of osteoarthritis and other joint disorders: A review of the literature." Current Medical Research and Opinion, 22(11), 2221-2232.